En el maravilloso mundo del trekking la mochila es uno de los elementos más importantes del equipamiento, entonces se hace necesario poner especial atención en la elección de esta.
Las mochilas de trekking se clasifican por su tamaño y capacidad de carga, esta se mide en litros (medida de volumen) y la elección de esta dependerá exclusivamente de la actividad a realizar y de la capacidad de carga de la persona que va a transportar el equipo.
Hasta 40 litros. Estas son utilizadas para trekking de no más de un día.
De 40 a 65 litros. Su uso más habitual es para trekking en los cuales se pasa una noche en la montaña.
Más de 65 litros. Este tipo de mochilas es el más común por todo el mundo del trekking, ya que es la que se utiliza para trekkings o expediciones de varios días.
La correcta carga del equipo y la indumentaria en la mochila garantiza no sufrir dolores de espalda ni padecer el peso de la mochila durante el trekking, para esto te brindamos consejos prácticos para armar correctamente tu mochila.
Lo importante al momento de armar tu mochila es que la carga este bien distribuida y equilibrada, esto te permitirá caminar por distintos terrenos y optimizar tu centro de gravedad. Si la carga está equilibrada, evitarás dolores y lesiones de espalda.
Ubicación correcta
En el fondo de la mochila hay que colocar lo que no vayas a utilizar durante el día. Por ejemplo: la bolsa de dormir.
El material pesado como puede ser la carpa, calzado, equipo de cocina, etc. se coloca a lo largo y pegado a la espalda.
Es conveniente tener algunos elementos a mano como pueden ser vestimenta de abrigo, set de higiene, etc., estos elementos lo mejor es ubicarlos en la parte de arriba de la mochila.
En los bolsillos de la cubierta superior ubica el material liviano que utilizarás durante el día: brújula, mapa, lentes de sol, protector solar, crema labial, etc.
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